Irlanda es un país en el que la naturaleza siempre está presente. Sus paisajes nos hablan de un mundo rural, de una costa dura pero hermosa, de pequeñas villas donde el tiempo parece detenido, de ciudades de ritmo aún pausado.... en medio de este marco natural encontramos jardines que han heredado mucho del pasado británico, mezclándose con la peculiar idiosincrasia del pueblo irlandés. En este viaje recorremos dos regiones del país; por un lado la vibrante y dinámica Dublín, con grandes jardines que siguen la tradición del país vecino, y con jardines contemporáneos que muestran la fuerza de la jardinería irlandesa actual. Y por otro, Cork, la bellísima capital del condado de igual nombre, y la puerta para explorar ese mundo natural en estado inmaculado, donde recorreremos los jardines al lado del mar en la bahía de Bantry, y la maravillosa quietud del parque nacional de los lagos de Killarney.